En lugares como en Hong Kong donde el metro cuadrado está por las nubes, viejas tuberías de agua sirven para vivir.
Las tuberías diseñadas por James Law Cibertecture tienen 2.5 metros de ancho que se convierte en una casa de 9 metros cuadrados aproximadamente, que contiene puertas, una cama que se da vuelta para que sirva de banca, una micrococina con nevera y microondas, baño con ducha e inodora, suelo laminado y un panel frontal de cristal que son la puerta y ventana.
Cada vivienda pesa 20 toneladas lo que las hace fácil de transportar a través de grúas, y son apiladas en rincones insospechados.
Esta solución de vivienda está dirigida a ser el primer hogar de muchos jóvenes. ¿Podrías vivir en un lugar así?